Raúl Zibechi con Adolfo Pérez Esquivel
“Los jóvenes de hoy son más críticos que los de los setenta”, afirma Adolfo Pérez Esquivel a contracorriente de lo que piensa la mayor parte de su generación. Galardonado con el Nobel de la Paz en 1980, en plena dictadura militar argentina donde ya trabajaba con Madres de Plaza de Mayo, se formó como arquitecto y escultor. Pero la actividad a la que más tiempo dedicó fue la enseñanza en escuelas primarias, secundarias y en la Universidad.
En 1974 renunció a la docencia para coordinar una red de comunidades latinoamericanas para promover la liberación de los pobres a través de la no-violencia. Ese año fundó el Serpaj y en 1977 fue arrestado por la Policía Federal, torturado y retenido sin juicio durante 14 meses. En la conferencia pronunciada en Montevideo el martes 13 señaló que se violan los derechos humanos cuando la población no tiene acceso a un medio ambiente sano y a la seguridad alimentaria porque se privilegia la “economía especulativa” de los monocultivos y la minería por sobre la “economía de producción”. A continuación un resumen de la conversación que mantuvimos.