Los “refugiados ambientales”

Por María Cristina Rosas

, por ALAI


Debido a las deterioradas condiciones ambientales un número creciente de personas debe abandonar su tierra. Atender esta conflictiva migración forzada debe ser prioridad de la comunidad internacional.

El concepto de “refugiado” generalmente remite a las situaciones que se generan cuando las personas se ven obligadas a abandonar su residencia habitual debido a conflictos violentos que ponen en peligro su supervivencia, sea que emigren de un lugar a otro dentro de un mismo país (desplazados internos), o que crucen las fronteras internacionales.

La Convención de 1951 sobre el Estatuto de los Refugiados y su Protocolo de 1967 son la representación legal a nivel internacional de la antigua tradición universal de conceder asilo a quienes se encuentran en peligro. El refugiado sería toda persona que “debido a fundados temores de ser perseguida por motivos de raza, religión, nacionalidad, pertenencia a determinado grupo social u opiniones políticas, se encuentra fuera del país de su nacionalidad y no puede o, a causa de dichos temores, no quiere acogerse a la protección de tal país; o que, careciendo de nacionalidad y hallándose, a consecuencia de tales acontecimientos, fuera del país donde antes tuviera su residencia habitual, no puede o, a causa de dichos temores, no quiere regresar a él.”

En la actualidad, el número de desplazados internos dentro de los Estados supera, por mucho, a los refugiados que cruzan las fronteras internacionales. El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) refiere que en estos momentos en el mundo hay más de 36 millones de personas entre refugiados, solicitantes de asilo, desplazados internos y apátridas. Como se observa en el cuadro anexo, mientras que hay más de 10 millones de refugiados, la cifra que corresponde a desplazados internos es de más de 15 millones de personas. Leer más